viernes, enero 29, 2010

Si no se va la luz

Si no se va la luz, será porque los Pepe Gotera y Otilio que tengo en casa, instalarán a la perfección una toma de corriente para tres enchufes, uno para el frigorífico, otro para el microondas y otro para algún pequeño electrodoméstico (eso me dijeron ayer).

Estoy atrincherado en el cuarto del ordenador y oigo como resoplan, empujan, sacan cosas de una caja de herramientas, aunque parece (ni  me asomo) que está todo bajo control.

Es lo que les he dicho para darles confianza (que no sé si tengo) estoy por aquí, vosotros ya sabéis lo que tenéis que hacer (queriendo autoconvencerme)

La cosa es que yo vivo en una casa construida en el año 1967 y cuyas instalaciones fueron en su día....

¡¡¡diossssss suena un taladro a toda hostia!!!...

Sigo... Las instalaciones fueron en su día "retocadas" con una mezcla entre "manitas" y "ñapas" por el anterior dueño de dicha casa.

Es una casa muy divertida, pues te encuentras con interruptores que no encienden nada, con eternas lámparas azules en armarios escondidos y con tomas de enchufes doblados... me explico, que no están ni verticales ni horizontales, sino en ángulo... Es una maravilla esta casa... Siempre llena de sorpresas eléctricas sobre todo. Cuando yo vivía en la casa de arriba con mis padres y hermanos, recuerdo el constante ruido del taladro y me imaginaba lo que al final era: Una casa queso Gruyere con todos su agujeros tapados con enchufes y cosas insospechadas.

No oigo nada y no sé si es buena señal o mala. Es como cuando el niño que te ha tocado por hijo está en un cuarto anexo en silencio absoluto y tú absorto en tus absorteces, caes en la cuenta que llevas unos minutos sin oír al niño y cuando vas a la habitación anexa ves con horror como está pintando con esos rotuladores imborrables, indelebles, indeseables, toda tu ropa, la cama, las paredes y su propia carita de demonio.

¿Me asomo?

Joder es como una peli de miedo... Oigo ruidos y cosas pero no me atrevo a sacar la cabeza de esta pantalla.

Seguro que ellos me escuchan teclear y creerán que estoy trabajando o haciendo algo importantísimo, aunque mi pinta y la pinta de esta casa no denoten precisamente que yo parezca un notario.

Iban a venir a las 12 y son las 12:03... Es buena señal. han sido puntuales en el sentido de haber venido antes ¿no?

Voy a ver qué tal va la cosa....

2 comentarios:

Cinzcéu dijo...

Muy buen relato de terror sobre casas taladradas, enchufes doblados y un pobre tipo que teclea al sólo efecto de negarse a que unos demonios han invadido su residencia bajo la apariencia de electricistas matriculados... ¡por el mismísimo diablo! Al menos candidato a un Goya a la mejor idea de guión.
Un abrazo.

LOLITA LOP dijo...

mi vecino de al lado , para que te hagas una idea le llamamos desde hace 4 años que vive aquí "el taladrador" ) , pasa horas y horas haciendo agujeros con un estruendoso aparato y sino saca una brocha y pinta lo impintable ... es horrible , un día salgo y veo que se ha lanzado y ya eue estaba pintando su fachada ha seguido con la mía , casi me muero , te lo juro , con un bote de purpurina plateada que hace sangrar los ojos que lo miran ... Ahora ha colgado el cartel de SE VENDE , pero aún así sigue taladrando , yo empiezo a estar preocupada ...

Por cierto veo que en las reformas , no entraba en los planes el cambio de cortinajes ¿ no? , jajaja