sábado, septiembre 18, 2010

La Novela de las Mil Novelas

Hace unos meses, no sé cuantos, me compré en una de esas tiendas de libros antiguos y de ocasión, un libro con un título un poco raro: La Novela de las Mil Novelas.

Me lo traje a casa después de echarle un ojo por encima y suponer que lo de las mil novelas sería por ese tipo de libros en los que si piensas que va a pasar una cosa, tienes que ir a la página 413 y si piensas otra a la 254.

Al pagar y meterlo en una bolsa de plástico, vi que entre las hojas, o de una hoja a otra, parecían moverse como unos bichitos que se me antojaron hormigas.

Al llegar a casa, pensé: lo sacudiré un poco, no sea que además de las mil novelas, me lleve una plaga de mil hormigas.

Empecé a los pocos días y la historia, aunque un poco espesa sobre espionajes y dobles agentes y mensajes encriptados para burlar al enemigo espía, me atrajo inmediatamente.

Lo tremebundo de esto es que este libro, es una novela viva.

Durante los primeros días, creí que estaba perdiendo la razón, pues al volver a leer desde el punto en el que había dejado mi libro el día anterior, no entendía lo que leía, pues los acontecimientos se habían desarrollado de un modo tan sorprendente, como diferente. Me iba unas páginas hacia atrás y lo que había leído hace dos días, ya no era del modo que yo recordaba, sino que un fleco literario, que pensaba yo que se me había quedado en el tintero, hacía que todo diese un giro que volvía la historia del revés, pero que me volvía a enganchar totalmente interesante y renovada.

Un día, decidí leerme el libro del tirón a ver qué pasaba, pero el sueño me venció. Un poco antes de caer dormido, observé como cientos de cositas negras, parecidas a hormigas, pasaban a toda velocidad de unas páginas a otras.

Eran las palabras que iban decidiendo cómo y dónde ponerse para ser leídas al día siguiente.

La historia y el libro, creo que me van a acompañar hasta que muera y alguien lleve La Novela de las Mil Novelas a una de esas tiendas de libros antiguos y de ocasión para ser leída y releída; siempre nueva...