Hoy ha ocurrido cerca de Madrid un accidente terrible en el que una pareja ha muerto aplastada en su coche por el vuelco de un camión.
El hombre se llamaba Alberto y la mujer Eva. Ambos estaban esperando un bebé para diciembre.
Con Alberto trabajé hace años en la empresa de la que me fui hace ya 4. Su padre fue el jefe de la última obra en la que yo estuve en dicha empresa de construcción cuyo nombre guardo para mí.
A Eva apenas la traté pues aunque compartíamos empresa, no llegamos a trabajar juntos.
La última vez que los vi fue en casa del hermano de Eva, en la que aparecimos a tomar algo después de un concierto en Las Rozas de Madrid.
Cuando me ha dado mi hermano la noticia, me ha dado mucha pena, pero he sido incapaz de ir al tanatorio a mostrar mis respetos a la familia.
¿Soy un egoísta?
No sé.
Puede ser.
Y no trato de justificarme, pero no me ha dado la gana ir allí y ver a antiguos compañeros con los que en su día compartí alegrías y trabajo y cachondeo.
No me ha dado la gana “tener” que ir con el corazón hecho un puño y ver el dolor de la gente.
Siempre en esos lugares se acaba diciendo: “Joder, siempre nos vemos en estos sitios. A ver si nos vemos tomando una caña…”
Pero las gentes pasan y pasamos por las vidas de unos y de otros y las circunstancias hacen que sin malos rollos, dejemos de ver a esas personas. Al final nunca hay esa caña o esa cena y sí la llamada que te dice la noticia de la muerte.
Yo brindo por vosotros; Eva y Alberto y por vuestra cría no nacida, pero brindo con la alegría de la última vez que os vi. Con la alegría de “a ver si nos vemos tomando una caña…”
Un beso; chicos…
El hombre se llamaba Alberto y la mujer Eva. Ambos estaban esperando un bebé para diciembre.
Con Alberto trabajé hace años en la empresa de la que me fui hace ya 4. Su padre fue el jefe de la última obra en la que yo estuve en dicha empresa de construcción cuyo nombre guardo para mí.
A Eva apenas la traté pues aunque compartíamos empresa, no llegamos a trabajar juntos.
La última vez que los vi fue en casa del hermano de Eva, en la que aparecimos a tomar algo después de un concierto en Las Rozas de Madrid.
Cuando me ha dado mi hermano la noticia, me ha dado mucha pena, pero he sido incapaz de ir al tanatorio a mostrar mis respetos a la familia.
¿Soy un egoísta?
No sé.
Puede ser.
Y no trato de justificarme, pero no me ha dado la gana ir allí y ver a antiguos compañeros con los que en su día compartí alegrías y trabajo y cachondeo.
No me ha dado la gana “tener” que ir con el corazón hecho un puño y ver el dolor de la gente.
Siempre en esos lugares se acaba diciendo: “Joder, siempre nos vemos en estos sitios. A ver si nos vemos tomando una caña…”
Pero las gentes pasan y pasamos por las vidas de unos y de otros y las circunstancias hacen que sin malos rollos, dejemos de ver a esas personas. Al final nunca hay esa caña o esa cena y sí la llamada que te dice la noticia de la muerte.
Yo brindo por vosotros; Eva y Alberto y por vuestra cría no nacida, pero brindo con la alegría de la última vez que os vi. Con la alegría de “a ver si nos vemos tomando una caña…”
Un beso; chicos…
13 comentarios:
No es agradable ir a sitios así pero creo que compartir el dolor es algo que tenemos que hacer por empatía y por calor humano.
Luego hay mil maneras de demostrar la sensibilidad, no todo son convencionalismos.
Un saludo y lo siento por Eva y Alberto.
se me ha puesto la piel de gallina ... estas cosas impresionan ... el consuelo es que se han ido los tres juntos ....
Lo de los pésames , entierros, tanatorios y funerales , es muy personal ... yo acostumbro a ir sin ser vista ... cuando el dolor es fuerte no me apetece que me vean ...
besos Vito y para ellos luz , estén don de estén ...
Yo no creo q sea necesario ir en esos momentos a ningún sitio, y mucho menos por obligación. En cualquier caso, tanto si decides ir como si no, es algo muy personal q hay q respetar.
Cada uno vive y lleva estos momentos como siente o necesita, y no hay más.
¿Crees q el ir al tanatorio a mostrarte tus respetos a la familia te haría mejor persona y q por no haberlo hecho no lo eres?, no Vito, no. Lo q te hace buena persona son otras cosas, como este pequeño y particular homenaje a Eva, Alberto y a su hija no-nata.
Además en esos momentos la familia no suele enterarse de quien está y quien no está, y sinceramente, es lo q menos importa.
Besazos, querido Vito
Siempre es una pena, el absurdo de esas vidas que se van.
Quedaté con los buenos recuerdos.
Y no se que más decir.
Ah si..Un beso grande.
pilix: Te doy la razón. A nadie le "apetece" ir a esos sitios. Si hubiese seguido en esa empresa, si habría ido. Lo que no quería era encontrarme con viejos amigos, con antiguos compañeros a los que en otras circunstancias saludaría efusívamente. Perdón por mi egolatría, pero lo que yo no quería (y seguro que hubiera pasado) era ser el centro de atención cuando no debía serlo. Besos
LOLITA: A mí también me ha consolado relativamente el hecho de que no se haya quedado ninguno de los dos.
Aunque no soy nada creyente y si la hacen, probablemente si iré a la misa de funeral. Un beso.
Cobre: Lo que si me ha salido del alma es escribirle una carta al padre del chico con el que si trabajé codo con codo, expresándole mi dolor y mi apoyo para lo que sea. Besitos
chulima: Tengo muy buenos recuerdos de Alberto (como digo en el blog, a Eva apenas la conocía) así que me quedo con ellos y con la sensación de que mientras recuerdas a alguien, no se acaba de ir del todo. Besos gordos.
Una cosa:
1) Seguro que el padre de Alberto te agradece mucho más esa carta, que tu presencia allí.
Besos rellenos de buenos recuerdos.
mendieta quintana: Ojalá mis palabras le ayuden a mitigar un poquito su dolor, aunque tan reciente está el accidente que no creo que le alivie mucho ¡Besos de buenos tiempos pasados, presentes y futuros!
Esa difícil comentar una entrada tan personal pero algo quiero decir: "no me ha dado la gana ir allí" es una razón poderosa para brindar por la memoria de esa gente de otro modo y en otro lugar. De egoísmo, nada: es sólo cuestión de estilo y de cómo cada cual resuelve sus dolores tan humanos. Un abrazo.
Te comprendo. Siento muchísimo lo de esta pareja y lo de tantas personas a las que vamos conociendo y queriendo.
Yo no puedo ir a ningún funeral, o a la casa de nadie querido que haya fallecido porque termino llorando más que la familia. Soy mala compañera en esos instantes, pero supongo que, como contigo, la familia ya sabe que estoy para lo que me necesiten.
Un abrazo
cinzcéu: Me alegra que me "comprendas". Hay gentes a las que a lo mejor les gusta más estar que ser o que sentir, aunque tampoco juzgo a nadie, que conste. Abrazos.
tha: Lo que más cuesta digerir es la inoportunidad de este tipo de muertes. No quiero decir que haya algunas oportunas, pero sí algo más "lógicas". Besos, guapa.
No creo que sea un acto egoísta. Simplemente prefieres quedarte con los buenos recuerdos de esta pareja y de la gente con la que te encontarías allí.
Qué desgracias, joder...
¿ que pasa Vitorio , te ha secuestrado Luccino ?
que no se oye ni se sabe nada de ti ...
besos
te entiendo , mi niño, yo he pasado por una muerte reciente y por un accidente propio y se k kien mas lo siente no es el k va al tanatorio o al hospital. buru
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