El otro día, cuando volvíamos de comer, vimos a unos pocos kilómetros dos columnas de humo; una blanca y otra negra y bromeamos al respecto pensando que una vez más, algunos espabilados nos habían robado cables de cobre y estaban quemándolos para obtener el metal que se paga bastante bien en el mercado negro cobrizo.
A mí incluso se me ocurrió otra chorrada aún mayor diciendo que habemus Papam por la fumata blanca tan espectacular.
Cuando llegamos a la oficina y quisimos consultar los resultados de los españoles en las Olimpiadas, leímos con sorpresa primero y con consternación después que el humo se debía al accidente de un avión de la compañía Spanair que acababa de ocurrir, casi al lado de nuestra obra, y que iba contando muertos a medida que pasaban los minutos.
Pero la reflexión que propuse al respecto en un foro de Psicología al que me acabo de apuntar fue que aún sintiendo un profundo dolor y un innegable y total respeto por las víctimas del accidente y por sus familiares y seres queridos, ¿no ocupa la prensa un lugar demasiado prepotente a la hora de dar las noticias?
Reconociendo que cuando algo pasa a tu lado te afecta más que lo que pasa en Nueva Zelanda, a mí, me resulta vergonzoso ese regodeo respetuoso, ese cotorreo dramático que lo único que hace es deprimir a la gente.
¿Para qué quiero saber las últimas palabras que una madre medio muriendo le dijo a su hijo antes de fallecer aplastada?
¿Es eso noticia?
Y sobre todo: ¿Por qué los muertos ajenos nos parecen menos muertos, menos “llorables”, menos importantes?
¿Acaso no mueren más de 20 personas en carretera todos los fines de semana? Al mes son 80
¿Por qué nos importan un pimiento?
¿Será porque estamos acostumbrados?
7 comentarios:
Quiero suponer, casi estoy seguro, que la TV española es como la nuestra; y con esto me refiero al tratamiento escabroso y macabro de los medios frente a la tragedia, algo que difícilmente nuestra cultura pueda superar. Eso, lamentablemente, "vende" más que la objetividad y respeto con el cual estos eventos luctuosos debieran tratarse.
Por lo demás, Vito, no es que nos importe un comino, ni que estemos acostumbrados. Simplemente estamos anestesiados.
Anestesiados pero manipulables. Hay muertos que impactan más que otros, y coincido con el ejemplo de los accidentes de tráfico. Y sí, yo también soy una insensible, porque en cuanto me cuentan por quinta vez algo del avión en cuestión, apago la tele. ¿Lo siento menos por eso? Yo creo que no.
Ah, y gracias por tu bienvenida ;)
buenas noches Don Vito ... A mi la noticia en cuestión me sorprendió en un autobús de la empresa de Blas cuando viajaba de Madrid al Alamo . Me llamó PIno, me lo dijo , me quedé helada ... Desde que empecé a trabajar hace ya unos 21 años he tenido que coger muchos aviones , ahora un poco menos , pero muchos de esos en lugares del mundo donde no funcionan ni los cinturones de seguridad y la gente sube hasta gallinas ... me hacía gracia , ahora ya no ,... de unos años a esta parte les he cogido miedo , los cojo por necesidad , y la verdad es que siendo tan cerca y una compañía que utilizo habitualmente me dió mucho miedo ...
Tú no hablabas de eso , ya lo sé , pero me apetecía decirlo ...Llegué al Alamo con fiebre y muy malamente y me he tirado 4 días tirada entre la cama y el sofá (no por lo del avión, sino algún extraño virus que entro en mi en el pueblo de Mariajo )... al final opté por apagar la televisión ... no soportaba ver a esas periodistas persiguiendo con la alcachofa a los familiares y preguntandoles eso de : " ¿como se sienten? ... pués como se van a sentir cojones ... que parece que estamos esperando que haya una catástrofe para llenar horas y horas de televisión intentando dar un dato más que los demás canales y dando datos de si unas hermanas se acababan de conocer días antes y ahora estaban muertas o si uno era su primer viaje en avión ... en fín , muy fuerte ...
besos que me voy a dormir que hoy he empezado a trabajar y necesito descanso ;)
hang tucker: Vuestra televisión es probablemente muy parecida a la nuestra. Y es verdad que efectivamente si nos importa el goteo de muertes en carretera o en Iraq. Lo malo es que estamos acostumbrados sin derecho a estarlo. Imaginemos que es natural. No vamos a estar llorando muertes todo el día.
Abrazos.
ma'heona'e: Bienvenida a estos mundos. La palabra es esa: manipulación de noticias, de sentimientos, de opiniones, de informes que nos acaban volviendo insensibles. Besos y de nada.
LOLITA LOP: A mí a día de hoy me sigue sin dar miedo coger un avión, aunque reconozco haberlos cogido en países "de fiar" pero vamos, entiendo perfectamente tu miedo y seguro que si tuviese que coger un avión de Spanair a Gran Canaria, a lo mejor me daba algo más de susto.
No me digas que has pillado una mariajitos aguda :D
Besos de fin de semana.
Somos unos morbosos a los que hay que empapar de información, como es natural terminamos empachados y por ultimo asqueados.
En fins, quizás deberiamos volver a los tambores y a los timbales.
Shaluditos Vito... :-)
Es que una cosa es la "noticia" (mediada) y otra la "vivencia": si vemos la columna de humo, pues nos recuerda "más" que nos vamos a morir. Una gente (nosotros) que sube a máquinas gigantes que se elevan a miles de metros -o medianas que corren a 150 km/h por cintas de asfalto- de vez en cuando se va a pegar flor de hostia y van a morir unos cuantos. Es que morirse es de lo más natural, máxime bajo tanto condicionamiento antinatural.
Saludos.
Publicar un comentario