Decidido. Me quedo de vacaciones. Es decir; no me marcho de vacaciones sino que me quedo. Lo digo por si no había quedado claro: Me quedo.
Justificaciones: tantas como se quieran o se puedan. En mi caso hay varias, pero vamos, la principal es una; a saber: no me gusta viajar solo y menos a la playa donde me repatean los niños y toda esa gente apelotonada en sus multicolores toallas; todos revueltos y haciendo casi el mismo ruido que esas focas que salen en cualquier costa Antártica en los documentales de National Geographic y a las que entrevemos justo antes de que el dios Morfeo nos acune en su seno de dulce siesta vespertina.
Además, es que el sol no me gusta mucho y cuando alguna vez he ido a la maldita playa, me pongo mi crema de protección no se cuál y luego pongo (sin querer) las manos todas llenas de crema en la arena y veo que me he dejado una rodilla sin crema (que no sé para que cojones tenemos tantas rodillas) y me doy la crema y me esparzo toda la arena de las manos en la pierna (en la otra)...
Ya no hay remedio (me digo) y cojo y me tumbo en la toalla multicolor y noto como toda la arena se me clava en mi foca-persona multicolor y ya convertido en croqueta todo rebozadito, me quito las gafas (5 dioptrías en cada ojo), elijo una referencia al azar (como un intrépido navegante) por ejemplo esa madre con esos niños tan hijoputas (con perdón para la señora) y me voy al agua.
Como está llena de algas y medusas, cojo y me voy un poco más a la derecha según se mira al mar, todavía como hombre croqueta. Logro bañarme pero nada de nadar, que mis foca-personas congéneres han decidido meterse precisamente ahora en el agua, esta vez remedando otro documental en el que se ve como unos simpáticos pingüinos saltan todos a la vez al gélido océano.
Me acojono ante una cosa transparente creyendo que es una medusa gigante, pero respiro tranquilo y doy gracias a Dios por la contaminación humana marina, pues la temible medusa, resulta ser un plástico en el que pone ‘Toallas Multicolor El Chirinwuibiri-100% cotton’.
Salgo y no encuentro a la señora, aunque si a miles de clones de la hija de la gran… que parece que se han comprado todas el puñetero bañador en el Carrefur (aparte de mi miopía; claro).
También (me digo) podía haberme fijado como referencia una esbelta muchacha, con un minitanga y en top-less y con su cabellera rubia como el trigo desafiando al viento marino, pero va a ser que: o no ha venido o no estaban grabando un anuncio de champús que por lo visto siempre los graban en invierno y por eso se les notan a las pobres modelos los pezones tan duros y puntiagudos.
A las tantas, logro ver mi toalla multicolor arrebujada. Ni rastro del móvil ni de la cartera, aunque los hijos de la gran… me han dejado las gafas para ver el vacío; la nada. Me agacho desconsolado y me vuelvo a empanar, a rebozar en la arena mientras lloro de alegría al ver que no me habían robado nada, sino que los niñitos de su madre me han dejado el móvil sin batería jugando a un juego que ni yo sabía que tenía y han hecho un castillito de arena tras cuyas almenas se encuentra custodiada (y enterrada) la cartera. Miro a la madre y a los niños con odio y me sacudo toda la playa de encima.
Me quedo de vacaciones.
13 comentarios:
Es que mira que da asquito la playa y estar todo el día como si fueras una croqueta, rebozadito de arena y pasando calor.
Y qué me dices de todo dios con el móvil hablando a voces en la playa; es patético.
Bueno, vitore, muy ingenioso lo de Me quedo de vacaciones, en vez del manido Me voy de vacaciones.
Una buena recomendación: Las vacaciones de Monsieur Hulot de Jacques Tati con una bebida fresquita y unas palomitas del Hipercor.
Y digo yo Vitore que tampoco es obligación lo de irse a la playa, que en la montaña se está fresquito y no hay posibilidad de encroquetarse, aunque eso sí, las rubias en tanga tampoco aparecen por ningún lado.
chasky: Es aborrecible la playa. Y como se suda además. Al chiringuito que me voy.
harry.c: ¡Qué película más buena!. ¡Gracias por la recomendación!.
e-jay: En realidad no es obligación nada, ni playa, ni montaña, ni rubias en tanga. Quizás en esto último las comunidades autónomas deberían contratar alguna para yo que sé. La cosa en realidad es que no me gusta viajar solo, aunque ahora me voy a Navacerrada a dar una vuelta.
alaaaaaaa, con lo q me gusta a mi la playa, anda que no es gracioso esto que nos cuentas, ;).
El caso es que te lo pases bien, disfrutes, desconectes, te desestreses, pierdas el tiempo...y todo eso, que es para lo que se hicieron las vacaciones, ¿no?
¡Pues eso!
Y lo agustito q va a estar mi niño Vito en madrid en agosto sin la mitad de gente coñazo q lo atasca cada día!!!.
Yo te digo lo q te han dicho por ahí arriba, la montaña es otra opción, y ya sabes tú q hay lugares en la montaña donde te puedes bañar y tomar el sol sin encroquetarte ni aguantar niños dando por culo!. Lo de la toalla de colores chillones y la rubia en tanga es como en los coches, opcional, pero casi q no.
Un día te rapto y te llevo, pero despues de las cerves... el coche pa tí!.
Un besazo!!!!
LA PLAYA ES RELAJANTE, NO DIRE QUE CALMA LOS NERVIOS, PERO SI UN POQUITO EL ALMA.
BESITOS COMPI¡¡
pluma roja: Exacto; niña. Las vacaciones son para vaguear. Me alegro que te guste la playa. 'Pa ti toa' jaja. Besos.
cobre: Si a mi no me gustan las rubias esas con tanga. Era por orientarme todo cegato en la playa. Eso de que me raptas y después la cerves y el coche para mí, ¿qué es?: ¿Qué yo no puedo beber una gota y tengo que conducir tu coche?. ¡Qué listita!. Besos Granini (es que me he comprado un multifrutas).
tunia: ¡Compañera!. ¡Qué alegría me ha dado tu visita; niña! ¡Y qué mayúsculamente bonito lo que dices!. ¡Eres mi compi favorita y lo sabes!. ¡Te quiero miles!.
Otra opción sería que vengas para estos lares, te garantizo que no verás rubias en minitangas, aunque sí unas cuantas morochas con bufandas en una nueva moda estilo musulmán. También podés hacer el tour piquetero, por unos pocos cientos de euros podés gozar de tres cortes de ruta, o bien el paquete completo, con represión policial y 48 hs en una cárcel argentina incluidos (de paso podés conocer lo demás). Besos, que pases bien tu quedarte.
He leído muchos relatos de vacaciones pero ninguno tan bueno como este de no-vacaciones. Una propuesta para no viajar solo ni gastar mucho dinero: visitar Madrid como turista. La ciudad de cada cual esta llena de lugares, momentos y sorpresas que apenas si apreciamos en nuestro devenir cotidiano (ya parezco de una agencia de turismo urbano...). ¡Buenas vacaciones, Vitore!
grismar: Prefiero ir en vuestro verano a Argentina, no sólo por las morochitas en tanga, sino porque si me detienen, en la cárcel se tiene que pasar un calorcito humano del bueno aunque sólo lo pueda disfrutar 48 horas. Besos!.
cinzcéu: Visitar la propia ciudad como turista tiene además el aliciente de ver como algunos de tus conciudadanos trabajan mientras tú te tomas un café con leche con la leche templada; un zumo de naranja y un croissant y cuando te aburres de ver como trabajan, hojeas displicentemente el periódico. ¡Gracias!.
:-))) Después de esa maravillosa e idílica descripción de un día de playa, no me extraña nada que decidas quedarte sin vacaciones, claro que también podrías cambiar la playa por la montaña, allí por lo menos encontrarías menos gente o ¿va a ser que también tiene sus inconvenientes?.
Bueno, disfruta en donde mejor te parezca.
Buen fin de semana.
leodegundia: ¿Inconvenientes la montaña?... Desde luego menos... Hasta que aparecen los excursionistas con sus botitas de goretex y en cuanto dan un paso les salen 1000 ampollas y no le dejan a uno escuchar el silencio del monte... :-) Buen fin de semana para ti también!
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