domingo, marzo 12, 2006

Autobuses


Ayer, mientras iba acompañado de mi hermano Juancar para ir a tomar un café con nuestro amigo “de toda la vida” Jose (sin acento en la e), tuve uno de esos instantes de videncia “de cinco segundos antes” que consistió -en este caso- en saber que un autobús de la línea 146 en el que íbamos a subir, iba a pasar (y pasó) a una distancia perpendicular tal con respecto a la calle por la que bajábamos que incluso si hubiésemos podido trazar a grandes zancadas una hipotenusa que uniese nuestro punto en ese momento (A) con el vértice opuesto del cateto mayor (C)=(la parada del bus) y aunque se dio la circunstancia positiva para nosotros de que el semáforo anexo a la parada estaba en rojo (esto no lo previó Pitágoras); cuando llegamos al ángulo de 90º (B) que es el que une ambos catetos, solo pudimos ver como el bus esperaba un rato al semáforo en verde (C) y se escapaba de nuestra vista y desde luego de nuestra ni siquiera iniciada carrera.

Por suerte; en el barrio (como en la vida); siempre viene otro bus más tarde o más temprano. Somos nosotros los que a veces sentimos miedo de montarnos en uno que no sabemos dónde nos llevará y lo dejamos pasar para coger nuestro seguro “146”.

Aunque; por otra parte; también es verdad que hay líneas de autobuses cuyo recorrido ni siquiera intuimos y en los que a lo mejor sí subiríamos si supiéramos por dónde pasa esa ignota línea....

16 comentarios:

Cobre dijo...

Deberíamos coger de vez en cuando uno de esos autobuses cuyos trayectos no conocemos y pasar un buen rato viendo cosas nuevas y experimentando la sensación de no saber donde vas a ir a parar.
Al fin y al cabo la línea de siempre ya la conocemos, no¿? ;)

Un beso.

Grismar dijo...

Cualquiera que le vea el lado pitagórico a la vida merece arriesgarse en cualquier viaje, lo peor que le puede pasar es descubrir que el orden de los factores sí altera el producto.

Anónimo dijo...

Mientras no te ocurra lo mismo que a los personajes de Moebius todo está bien, Vito.

Vitore dijo...

cobre: A mi me suele sorprender hasta la línea de siempre. ¿Cuánto más me sorprenderá la nueva?.. ;)

andrea recol: Mis buses suelen ser metasemafóricos también, sobre todo cuando se escapan en verde riéndose en mi roja carita.

grismar: Menos mal que la raiz cuadrada de la suma de los cuadrados de los catetos siempre es la hipotenusa. O no.

hang tucker: No conozco la película (he leido por lo menos tu enlace). Desde luego la famosa Cinta de Moebius ya parece per se tan inquietante como el film.

Cinzcéu dijo...

Lo curioso es que la línea 146 también pasa por el centro de Buenos Aires, exactamente por el famoso obelisco porteño. Me pregunto si alguna hipotenusa ultramarina unirá en algún punto sus distantes trayectos.

Anónimo dijo...

Ahora, querido amigo, sólo os falta decidir quién de los tres es el cateto mayor, quien el menor y quién la hipotenusa.

Vitore, príncipe, tú no estás bien :)

Tunia dijo...

COMPI ME ENCANTAN TUS DIBUS¡¡¡AUNQUE TUS HISTORIAS ME GUSTAN MAS¡¡
BESITOS

Vitore dijo...

cinzcéu: No te quepa duda. Las hipotenusas son muy cariñosas ellas.

sebastiandell: Yo con todo derecho soy el cateto pequeño, el mayor es mi hermano -que para eso es cateto; digo mayor- en cuanto a Josesinacentoenlae no le queda otra al pobre señor. ¿Por qué dices que no estoy bien?... Ah, por eso...

tunia: ¡Tú si que le subes la moral a uno!. Otro beso para ti; compañera.

Anónimo dijo...

Por lo de la guitarra, tonto. Sin ella estarías mucho más... sugerente :p

Anónimo dijo...

Los autobuses son un universo paralelo, es cierto.
A mi siempre me encantaron los asientos donde debajo tenias el bulto ese de la rueda.
Qué cosas.
Ahora en fallas todos dan asco, eso sí.

Vitore dijo...

sebastiandell: hazme caso; es con la guitarra como estoy sugerente. Sin ella, estoy solo deseable.

nada importa: es lo que tienen los autobuses en Fallas, que si van pintados de bonitos colores y encima vas dentro con una cara un poco rara, igual te votan como ninot indultat del año... Está bien lo del asiento de la rueda, a mi me gustan los que tienen esa rueda al lado para poder apoyar el pìe... Qué cosas.

Cobre dijo...

Coño vitore yo también tengo esa puñetera manía!

Vitore dijo...

cobre; Pues mira, ya tenemos algo en común. ¡Casémonos!

Verso dijo...

Me gusta venir a tu casa, haces belleza de lo cotidiano, tienes mucha gracia relatando las cosas, jate lo que dió de sí !!!, el dibu perfecto y tu letra muy bonita, si es que antes se hacía caligrafía, ahora son un dolor las letras de la ESO.
Un abrazo.

Vitore dijo...

incondicional: Calla, que no has visto la caligrafía inglesa que tenía yo de niño. Mi profe decía que ya no se podía escribir mejor. Otros tiempos, claro. Abrazo para ti.

Cobre dijo...

No me lo digas dos veces q voy a tu casa y hago una pedida de mano formal eh!!

la q avisa no es traidora ;)