Hace unos cuántos años, seis para ser exactos, decidí darme uno de esos caprichos que uno algunas veces se "niega" a sí mismo, pero que otras veces, nos damos sin ningún rubor: me compré un Volkswagen Golf de color rojo; es decir, el coche que siempre me había gustado, aunque ya a la hora de comprarlo, me vi en parte obligado a comprarme "otra cosa", pues cuando tomé la decisión, mira por donde, VW decidió cambiar el modelo y sacar al mercado uno nuevo, llamado eufemísticamente "Nuevo Golf", cuando todos sabemos que la palabra nuevo, se vuelve vieja en cuanto pasa un día y ahora mi Golf es mi viejo Nuevo Golf.
Me ha dado muchas alegrías. En él se han subido algunas de mis mujeres favoritas, le han metido mano, han hecho sonar canciones inverosímiles en su CD, el viejo Golf ha dado fresquito y calor a esas mujeres, que le han ido adaptando el asiento según midan 1.82 o 1.61...
Una vez, hace unos meses, nos dejó tirados a una de esas mujeres (a mi favorita, quizás) y a mi. Desde ese día ha ido renqueando, hasta que el otro día, decidió que aun circulando, esos tirones o falta de fuerza indicaban que algo le pasaba al pobre viejo Nuevo Golf.
Lo llevé al médico y le cambiaron la bomba de la gasolina. Cuando me lo dieron ya arreglado, olía a gasolina bastante, pero supuse que si le habían cambiado la bomba de la gasolina, tenía que oler a eso. Si le hubiesen cambiado la bomba de Dolce & Gabbana, hubiera olido a ese perfume tan sugerente...
Fue hace unos pocos días, cuando necesitando repostar gasolina, lo hice, me fui a pagar y cuando volví; un charco enorme se asomaba por debajo del coche. Se desangasolinaba... Lo llevé al parking... Se desangasolinaba menos... Cuando al día siguiente lo llevé al trabajo, con un olor inmenso a gasolina, se deangasolinaba mucho más. Tuve que llevarlo a urgencias y allí me sucedió algo increible.
Cuando me lo devolvieron, me dijeron que no les tenía que pagar nada porque había sido un problema suyo (del servicio oficial nada menos), y que como era de la avería anterior, que lo sentían, pero que no solo no tenía que pagarles nada, sino que me repostaron los pocos litros que había perdido por el camino y en la gasolinera. Así que lavadito, me lo llevé a dar vueltas y a seguir conociendo mundo y mujeres que le metan mano a él y al conductor...
5 comentarios:
¡huy, la primer! esto... ainsss me he puesto nerviosa. Bueno que ¡larga vida al nuevo viejo nuevo golf rojo! que me ha encantado siempre ese modelo y que espero poder, algún día, hacer uso de él o el conductor ;)
Un besooo (¡menos mal que cambiaste la plantilla! jajaja no me atrevía a decir ná)
Mar: Tanto el coche como el conductor, seguro que estaremos encantados de darte una vuelta... Y sí que habías dicho algo de la plantilla en el FB ¿no? :P Beso.
jajjajajaa ... muy bueno ...
me ha encantado lo de desangasolinarse o como se diga eso ....
Mira hace años , el coche de Pino , uns Sharan , también de Wolswagen , a los dos días de salir de una revisión en el taller oficial se quedó parada y se incendió el motor camino de Bilbao ... luego vino lo de la grua , el disgusto , etc ... El caso en que en aquellos días nuestros pensamientos estaban ocupados con algo más serio e importante en nuestras vidas , ( la pérdida de nuestro bebe , mi ingreso en el hospital y esas cosas ) , lo que hizo que esa faena no nos ocupara demasiado la cabeza ... al día siguiente una llamada del servicio técnico nos informó de que había sido un fallo de ellos , que habían olvidado ajustar nosequé piezas en la revisión , lo que había provocado aquel desenlace ... pagaron un motor nuevo y hasta hoy que superados los 400.000 km , la tía sigue tirando :)))9
yo no quiero meterte mano , pero si me gustaría una rondita en ese golf rojo a tomar unas cañitas y unas bravas ... y luego pues lo dejamos aparcado donde pille y nos volvemos en taxi que si bebes no conduzcas , jajajaja ... besooooooo
Lolita: Alucinante tu historia. Por lo que veo, la gente de Volkswagen sabe de qué va la película. Es decir, no es la primera vez que les pasa, jaja... Bueno, al menos son honrados y no se inventan averías nuevas. Y claro que cuando vengas a Madrid nos daremos un paseo, aunque si quedamos a cañas y a bravas, mejor en fotos el Golf, jejeje. Besos.
Esta historia la escuché en directo de tu boca y me reí, y ahora vuelvo a reirme leyéndote... Y es que eres un mito, Vito.
A mí me gustaba más la plantilla anterior, más tuya, pero bueno, me adapto a los cambios, lo que sea por seguir leyéndote por aquí o por donde sea, que siempre es un placer!
Besitos!
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