martes, septiembre 19, 2006

negro, gra.

Tiene que ser triste ser negro…

Y obviamente no me refiero a la felicidad o infelicidad de las personas que nacen, viven y mueren con ese color de piel y que reirán o llorarán como los blancos, los asiáticos o los de Sigüenza, sino a los que la Real Academia de la Lengua define en su:

Artículo enmendado. Avance de la vigésima tercera edición. negro, gra. que en la definición que me interesa ahora, que es la decimosexta reza así:

16.m. Persona que trabaja anónimamente para lucimiento y provecho de otro, especialmente en trabajos literarios.

Y es que tiene que ser triste ser este tipo de negros.

Debe ser como descubrir el Polo Sur y que el Jefe de la Expedición diga que ha sido él y le colmen de parabienes mientras tú dices: No me importa: he sido yo.

Debe ser como dar un pase irrepetible; con la precisión de un compás; a Maradona y que toda la vida se recuerde el gol del pibe pero no el nombre de quien dio el milimétrico pase.

Debe ser como asistir de simple espectador al Masters de Augusta, coger un palo cualquiera de golf (en esa época los hay hasta en el supermercado al lado de los donuts) y cuando no te ve nadie (por ejemplo a las cinco de la mañana) meter de un solo golpe una bola que había por ahí en el hoyo 7 y reírte tú solo de la casualidad.

Debe ser como donar esperma y por un despiste médico o por una curiosidad manifiesta, saber quien es tu hijo y admirarlo en silencio y gozar con su descubrimiento del Polo Sur antes de dedicarse al fútbol y antes de dar un pase irrepetible a Maradona en el Masters de Augusta; en el hoyo 7.

9 comentarios:

Guillermo dijo...

jajaja recuerdo hace muchos años en el colegio jugando al fútbol, estabamos en un partido del torneo del instituto, metí un pase que cruzó todo el campo y el bueno del equipo regateó al portero y metió gol. Y yo ni corto ni perezoso mientras el otro celebraba su gol yo gritaba dando vueltas por el campo "el gol ha sido pase mío, el gol ha sido pase mío" como si hubiera ganada la liga. No te digo, que estamos acostumbrados a celebrar solo el último acto, y no todo lo que hay detrás.
Bien a gusto que me quedé :-)

Cinzcéu dijo...

En rigor viene a ser como si uno mete el gol y el árbitro y la FIFA se lo acreditan a uno que estaba sentado en el living de su casa. Triste ser negro y triste que se llame negro a uno que trabaja para la gloria y riqueza de otro que no trabaja.

Anónimo dijo...

Vito, va siendo hora que reveles la identidad del negro/gra que escribe con tanto acierto tus entradas.

Mar dijo...

Bueno... para esto lo mejor es ser modesto, así te quedas con la satisfacción personal y te importa tres pepinos quien se lleve la gloria.
Iba a poner "besos negros" pero... lo dejo en solo besos que aquí le sacan punta a todo.

Cobre dijo...

Dónde irán los comentarios q se escriben y nunca llegan a aparecer!!...

Que te decía yo, creo recordar, q esto me parece muy fuerte!, q no son maneras de confesarme q no soy hija única!. Y cuándo fué? no me lo piensas presentar? voy a tener q compartir con él la herencia!??

(mira mira lo q casi te dice tha!; pero q despendole es este!!!?)

Un besazo niño Vitore ;))

Leodegundia dijo...

Si, es cierto que ser ese tipo de "negro" no debe de hacer muy feliz a una persona, pero como en todo hay que matizar, hay algunos negros de esa clase que lo son por voluntad propia, pero hay otros muchos (sobre todo el el trabajo)en el que los convierten en "negros" siendo los que realizan el trabajo pero que nunca reciben los premios y eso si que es triste y por desgracia demasiado frecuente.
Un saludo

Poldark dijo...

Tienes razón Vito. Y tiene que ser triste quedarse en esa tristeza desempoderada. Porque sólo con moverse unos pasitos a la izquierda se encuentra uno/a con que todo el poder de la palabra escrita nace de sus negras manos.

Un beso de "cuánto tiempo!"

Vitore dijo...

Gracias guillermo, cinzcéu, hang tucker, thalatta, cobre, leodegundia y juankar(¡cuanto tiempo!) por los comentarios y las visitas.

Besos.

Anónimo dijo...

¿Y ser negro como el que salió el otro día contándolo en algún telediario? Es triste, pero 15.000 euros por libro ayuda a sobrellevar la tristeza.

Se lo propondré a mi jefe.